conoscimos ser perdidos, i anduvimos por la Costa, por vèr si
hallariamos alguna cosa de ellos; i como ninguno hallasemos, metimonos
por los Montes, i andando por ellos vn quarto de Legua de Agua, hallamos
la Barquilla de vn Navio puesta sobre vnos Arboles: i diez Leguas de
alli, por la Costa, se hallaron dos Personas de mi Navio, i ciertas
tapas de Caxas, i las Personas tan desfiguradas de los golpes de las
peñas, que no se podian conoscer: hallaronse tambien vna Capa, i vna
Colcha hecha pedaços, i ninguna otra cosa paresciò. Perdieronse en los
Navios sesenta Personas, i veinte Caballos. Los que havian salido à
Tierra, el dia que los Navios alli llegaron, que serian hasta treinta,
quedaron de los que en ambos Navios havia. Asi estuvimos algunos dias,
con mucho trabajo, i necesidad, porque la provision, i mantenimientos,
que el Pueblo tenia, se perdieron, i algunos Ganados: la Tierra quedò
tal, que era gran lastima verla: caìdos los Arboles, quemados los
Montes, todos sin hojas, ni ierva. Asi pasamos, hasta cinco dias del Mes
de Noviembre, que llegò el Governador con sus quatro Navios, que tambien
havian pasado gran Tormenta, i tambien havian escapado, por haverse
Page annotations:
Add a page annotation: