parabamos, eran tantas las que nos havian dado, que traìa cada vno de
nosotros ocho, ò diez cargas de ellas; i los que traìan Arcos no
parescian delante de nosotros, antes se apartaban por la Sierra à buscar
Venados; i à la noche quando venian, traìan para cada vno de nosotros
cinco, ò seis Venados, i Paxaros, i Codornices, i otras caças:
finalmente, todo quanto aquella Gente hallaban, i mataban, nos lo ponian
delante, fin que ellos osasen tomar ninguna cosa, aunque muriesen de
hambre, que asi lo tenian ià por costumbre, despues que andaban con
nosotros, i sin que primero lo santiguasemos; i las Mugeres traìan
muchas Esteras, de que ellos nos hacian Casas, para cada vno la suia à
parte, i con toda su Gente conoscida: i quando esto era hecho,
mandabamos que asasen aquellos Venados, i Liebres, i todo lo que havian
tomado; i esto tambien se hacia mui presto en vnos Hornos, que para esto
ellos hacian; i de todo ello nosotros tomabamos vn poco, i lo otro
dabamos al Principal de la Gente, que con nosotros venia, mandandole,
que lo repattiese entre todos. Cada vno con la parte que le cabia,
venian à nosotros para que la soplasemos, i santiguasemos, que de otra
Page annotations:
Add a page annotation: