ansi lo entendia de hacer; i diciendo esto, se alargò con su Barca: i
como no le pude seguir, arribè sobre la otra Barca, que iba metida en la
Mar, la qual me esperò; i llegado à ella hallè, que era la que llevaban
los Capitanes Peñalosa, i Tellez: i ansi navegamos quatro dias en
compañia, comiendo por tasa cada dia medio puño de Maìz crudo. A cabo de
estos quatro dias nos tomò vna Tormenta, que hiço perder la otra Barca:
i por gran misericordia, que Dios tuvo de nosotros, no nos hundimos del
todo, segun el tiempo hacia; i con ser Invierno, i el frio mui grande, i
tantos dias, que padesciamos hambre, con los golpes, que de la Mar
haviamos rescibido, otro dia la Gente començò mucho à desmaiar: de tal
manera, que quando el Sol se puso, todos los que en mi Barca venian
estaban caìdos en ella, vnos sobre otros, tan cerca de la muerte, que
pocos havia que tuviesen sentido, i entre todos ellos, à esta hora, no
havia cinco Hombres en pie; i quando vino la noche, no quedamos sino el
Maestre, i Yo, que pudiesemos marear la Barca; i à dos horas de la
noche, el Maestre me dixo, que Yo tuviese cargo de ella, porque èl
estaba tal, que creìa aquella noche morir: i asi Yo tomè el leme, i
Page annotations:
Add a page annotation: