la Mar, en que los Indios, en dos veces que dieron en ellos, nos mataron
diez Hombres, à vista del Real, sin que los pudiesemos socorrer, los
quales hallamos, de parte à parte, pasados con Flechas, que aunque
algunos tenian buenas Armas, no bastaron à resistir, para que esto no se
hiciese, por flechar con tanta destreça, i fuerça (como arriba he dicho)
i à dicho, i juramento de nuestros Pilotos, desde la Baìa, que pusimos
Nombre de la Cruz, hasta aqui, anduvimos docientas i ochenta Leguas,
poco mas, ò menos: en toda esta Tierra no vimos Sierra, ni tuvimos
noticia de ella en ninguna manera: i antes que nos embarcasemos, sin los
que los Indios nos mataron, se murieron mas de quarenta Hombres de
enfermedad, i hambre. A veinte i dos dias de el Mes de Septiembre se
acabaron de comer los Caballos, que solo vno quedò; i este dia nos
embarcamos por esta orden. Que en la Barca del Governador iban quarenta
i nueve Hombres. En otra, que diò al Contador, i Comisario, iban otros
tantos. La tercera diò al Capitan Alonso del Castillo, i Andrès
Dorantes, con quarenta i ocho Hombres; i otra diò à dos Capitanes, que
se llamaban Tellez, i Peñalosa, con quarenta i siete Hombres. La otra
Page annotations:
Add a page annotation: